La casa más cara de Madrid está en venta: 19,5 millones en el Retiro, una amplia bodega y seis habitaciones

Las familias, cuando se embarcan en la aventura de buscar casa, empiezan por analizar los pros y los contras de cada una de las opciones.

El factor determinante siempre suele ser el precio, sobre todo cuando el inmueble se encuentra en alguna de las grandes ciudades del país. Las tarifas llevan meses batiendo récords y son muchos los consumidores que se han quedado, sin comerlo ni beberlo, fuera del mercado inmobiliario.

Esta escalada de los precios no impide que muchos curiosos visiten de vez en cuando los portales web para comprobar la evolución de las rentas y fantasear con las ofertas más atractivas. 

Madrid es una de las ciudades más caras para comprar o alquilar una vivienda, de hecho, la capital acapara el 10% del stock de inmuebles exclusivos que se reparten a lo largo y ancho del territorio nacional. Los pisos de lujo más preciados del país se encuentran precisamente en el barrio de Recoletos, en pleno centro de la ciudad. Sin embargo, este no es el único distrito con residencias de estas características.

La vivienda más cara de Madrid no está en la periferia, más bien todo lo contrario: el inmueble se esconde a pocos metros del parque del Retiro. El piso, con una superficie de más de 1.000 metros cuadrados, ocupa toda la planta de un edificio. La propiedad tiene unos ventanales de techo a suelo y vistas directas al Jardín Botánico. 

El apartamento ha sido reformado íntegramente hace pocos meses para convertirse en un producto de alto standing. Los interesados pueden adquirir este hogar en Idealista por nada más y nada menos que 19,5 millones de euros.

El piso tiene seis dormitorios y un gran vestíbulo de acceso. Las vistas son espectaculares desde casi todos los rincones de la casa, que se levanta justo al lado de uno de los pulmones de la capital. Los grandes ventanales permiten la entrada de luz natural durante prácticamente todas las horas del día y dan acceso a una impresionante terraza. La habitación principal cuenta con un salón de 200 metros cuadrados y baño exterior.

Los dormitorios, en general, son todos dobles y tienen vestidor y baño propio. La vivienda dispone además de una parte para invitados con dos suites y una pequeña cocina, para que también la gente de fuera se pueda sentir como en casa. Pero todavía hay más.

El inmueble tiene una cocina gourmet de concepto abierto, una amplia bodega para vinos, un gimnasio y tres trasteros de grandes dimensiones.