Boulevard de moda: el barrio porteño que sorprende con inversiones en 800 viviendas y gastronomía

En los márgenes de la ciudad, lejos de los ajetreados circuitos urbanos, emerge el apacible y prometedor barrio de Saavedra, que está experimentando un constante crecimiento y la incorporación de nuevos desarrollos inmobiliarios.

Con su amplio espacio verde y una variada oferta de actividades al aire libre, este trazado del corredor norte de la ciudad de Buenos Aires se ha convertido en un imán también para establecimientos gastronómicos que están revitalizando el paisaje con propuestas adaptadas a un estilo de vida dinámico y relajado al mismo tiempo

El núcleo del barrio se encuentra en su extenso parque de más de 14 hectáreas, desde donde se extiende el Boulevard García del Río como un elemento central. Esta expansión abarca ocho cuadras que se extienden entre Cabildo y el Parque Saavedra, así como manzanas cercanas, donde actualmente se están construyendo más de 800 viviendas de diversos tamaños.

Además del Boulevard García del Río, calles como Pinto, Conesa, Zapiola, Crámer, Jaramillo, Vilela y Paroissien, están experimentando un crecimiento notable en la zona.

Martín Lewi, de NIC Developers, resaltó ante Infobae que “una de las razones detrás de esta expansión radica en que esta área de la ciudad está estratégicamente conectada y se encuentra cerca de servicios, espacios públicos, instituciones educativas, clubes, además de haberse transformado en un atractivo polo gastronómico que atrae tanto a jóvenes como a familias con hijos en edad escolar y secundaria”.

Esta parte de la ciudad de Buenos Aires presenta varias ventajas, situándose a tan solo 10 cuadras de la Avenida General Paz, a pasos del Metrobus en la Avenida Cabildo, y a 14 cuadras de Libertador, además de encontrarse a 10 cuadras de la estación Congreso de Tucumán de la Línea D del subte.

Leonardo Ramos Couriel, de Ramos Couriel Real Estate, señaló a Infobae: “Saavedra se ha convertido en uno de los barrios más buscados y de moda, un fenómeno que se debe principalmente a sus extensos espacios verdes, altamente valorados durante la pandemia. Su paisaje, caracterizado por construcciones bajas como casas, PH y edificios de poca altura, crea un entorno con abundante luz y áreas verdes, lo que atrae a aquellos que buscan espacios amplios y luminosos con una conexión visual con la naturaleza”.

Qué se construye

Respecto a los desarrollos en curso en Saavedra, frente al parque y al boulevard, se están llevando a cabo alrededor de 10 obras de construcción, además de otros 45 proyectos en manzanas cercanas.

En esta parte del barrio, se están construyendo viviendas de 1, 2, 3 y 4 ambientes con grandes aventanamientos y generosa altura de piso a techo que superan los 2,50 metros.

Brian Goischain, director de la desarrolladora Wild, comentó a Infobae sobre un proyecto en García del Río al 3600, que ofrece unidades espaciosas con balcones aterrazados, techos de hormigón visto, y pisos de porcelanato simil madera. “Las cocinas están equipadas con muebles laqueados y mesadas de tipo silestone. El edificio cuenta con una piscina en el séptimo piso con vistas al parque y sistema de losa radiante por sectores en cada propiedad. La mayoría de las unidades son de 2 y 3 ambientes, y algunas son dúplex de 4 ambientes con jardines, parrillas y terrazas”, expresó.

Se ha enfocado en construcción de hormigón a la vista con detalles en negro, logrando viviendas que parecen casas. Algunas de las propiedades tienen terraza privada y pileta climatizada, y algunas incluyen quincho propio y parrilla, aspectos que son cada vez más demandados en diseños modernos para reuniones familiares y con amigos.

Los proyectos también ofrecen Salón de Usos Múltiples, solárium y gimnasio, además de áreas de coworking.

El barrio de Saavedra, que limita con Núñez al este, Coghlan y Villa Urquiza al sur, y el partido de Vicente López al norte, históricamente ha sido reconocido por su carácter residencial. Sin embargo, experimentó un cambio significativo luego de la modificación del Código de Planeamiento, que permitió la construcción de edificios de mayor altura.

“Este ajuste en las regulaciones ha motivado a numerosos desarrolladores a emprender nuevos proyectos. La escasez de terrenos y el aumento en sus costos han llevado a los desarrolladores a explorar áreas aún poco urbanizadas y menos intervenidas en busca de nuevas oportunidades”, concluyó De Simone.